
Cómo gestionar la transición para fortalecer la seguridad energética
- Publicado por Foro para la Electrificación
- El 26 abril, 2022
Cinco lecciones clave de la crisis actual sobre cómo gestionar el cambio a fuentes bajas en carbono reduciendo el riesgo de futuros shoks energéticos
La crisis provocada por la invasión rusa de Ucrania ha puesto de relieve los desafíos para el suministro de energía a medida que el mundo avanza para hacer frente a la amenaza del cambio climático. La adopción de tecnologías bajas en carbono puede ayudar a abordar los problemas de seguridad y asequibilidad energética, y fortalecer la resiliencia ante las crisis en el futuro. Pero las empresas, los inversores y los gobiernos deben gestionar la transición de la manera correcta, según el último análisis de Wood Mackenzie.
Ed Crooks, vicepresidente para las Américas de Wood Mackenzie, dijo: “Los precios altísimos de los combustibles fósiles son una amenaza no solo para los consumidores y las economías de los países importadores de energía, sino también para la transición energética en sí. Si los gobiernos quieren seguir avanzando en la reducción de emisiones, deberán demostrar que pueden ofrecer seguridad energética y asequibilidad al mismo tiempo a través de inversiones oportunas y políticas claras”.
Las cinco lecciones clave extraídas por los analistas de Wood Mackenzie son:
1. El mundo aún depende de los combustibles fósiles, y la transición energética debe centrarse en reducir la demanda primero, en lugar de la oferta.
La pandemia de Covid-19 y la guerra en Ucrania han resaltado la importancia central de los combustibles fósiles para la economía global y cuán finamente equilibrados están estos mercados, donde los combustibles fósiles aún representan aproximadamente el 80% de la energía primaria en todo el mundo.
Si las decisiones políticas y de inversión restringen los suministros de petróleo y gas, como desalentar la inversión en activos upstream o nuevos oleoductos, mientras la demanda sigue siendo sólida, esa volatilidad amenazará a los consumidores con períodos de precios altos.
Ann-Louise Hittle, vicepresidenta de Investigación de Petróleo de Wood Mackenzie, dijo: “Para evitar que empeore el riesgo de futuros picos en los precios del petróleo, el énfasis debe estar en reducir la demanda, seguida de la oferta, ya que las fuentes de mayor costo y mayores emisiones ya no son necesarias. Reducir la oferta mientras la demanda se mantiene fuerte es una receta para la crisis”.