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La etiqueta cero es la que identifica a los coches que se consideran libres de emisiones, los cuales pueden ser eléctricos o híbridos. Sin embargo, no todos los coches pueden optar por la etiqueta 0 de la DGT porque deben cumplir con ciertos requisitos, porque de lo contrario les corresponderá una etiqueta ECO.
Características de la etiqueta cero de la DGT
Debemos tener en cuenta que esta etiqueta ambiental actualmente funciona de la siguiente manera:
- Aplica para coches eléctricos o híbridos enchufables, siempre que estos últimos tengan una autonomía superior a 40 kilómetros.
- Están exentos de impuestos de matriculación y de circulación.
- Pueden acceder a las zonas ZBE, pueden circular en episodios de alta contaminación, y pueden aparcar en zonas de servicio de estacionamiento regulado SER sin coste y sin límite de tiempo.
- Pueden aplicar por subvenciones del plan MOVES III, con ayudas de hasta 7.000 euros para eléctricos y 5.000 euros para híbridos enchufables.
- Deducción fiscal del IRPF de hasta 3.000 euros.
Siempre que se cumpla con estos requisitos se podrá conseguir muchas ventajas en tu coche.
Cambios que vienen para las etiquetas ambientales
Las etiquetas ambientales están vigentes desde el pasado 2015, pero actualmente estas han quedado obsoletas por lo que se va a tener una modificación en las mismas. En cuanto a las etiquetas cero emisiones, los híbridos enchufables con una autonomía eléctrica superior a los 40 kilómetros hasta el momento pueden tener esta pegatina.
Pero, esto podría cambiar porque el Gobierno y la DGT están planteando modificar estos requisitos. En la nueva normativa se espera que los coches híbridos para optar por esta etiqueta deben contar con una autonomía eléctrica de por lo menos 90 kilómetros, dejando fuera a cientos de modelos actuales que no tienen esta autonomía.
Sin embargo, el cambio de legislación no tendrá carácter retroactivo, por lo que únicamente afectará a los coches que lleguen después de que la ley entre en vigor.
¿Qué dice la OCU al respecto?
La OCU ha solicitado que se cambien los criterios para otorgar este tipo de etiquetas, después de hacer un estudio en el que llegaron a las siguientes conclusiones:
- Los coches eléctricos son más sostenibles, porque más de la mitad de las emisiones se dan al fabricar el coche y sus baterías, lo cual compensan en su uso. Por este motivo, los motores que garantizan menos emisiones son los coches 100% eléctricos.
- Los coches con etiqueta C pueden contaminar menos que algunos híbridos de los que cuentan con etiqueta cero o etiqueta ECO. Esto debido a que estos híbridos pueden tener un consumo más elevado de combustible por el peso extra que representa para el coche las baterías necesarias para brindar la autonomía eléctrica.
En este orden de ideas, se pide que se evalúe el otorgamiento de las etiquetas cero a los híbridos que pueden generar más emisiones que un coche con etiqueta C, debido a que sería menos sostenible ambientalmente.
Una nueva etiqueta de la DGT
Además de los cambios en la etiqueta cero, se está trabajando desde la DGT en una nueva etiqueta que hace referencia a la seguridad y que deben llevar todos los coches. Esta etiqueta busca clasificar todos los vehículos en función del grado de protección que ofrecen.
Esto se basaría en el equipamiento de seguridad activa y pasiva, y en los resultados obtenidos en las pruebas de choque. Esta etiqueta se encuentra en fase de desarrollo, por lo que aún no se ha dado nada por sentado.
En función de este nuevo etiquetado se podrán establecer limitaciones a la circulación de ciertos vehículos a ciertas zonas. Esto también podría afectar los seguros de coches y los precios en renting y alquileres de coches.
¿Cuándo se espera el cambio en las etiquetas?
El nuevo sistema de etiquetas necesita cambiar una normativa vigente se requiere de la colaboración del Gobierno, Fabricantes, DGT, asociaciones automovilísticas y de los consumidores. De esta forma se pueden tener muchas quejas sobre el cambio de las etiquetas.
Sin embargo, hay coches que no tienen distintivo ambiental y que deberían portar una etiqueta B, mientras que otros llevan etiquetas ECO o Cero y no deberían. Por este motivo, se está planteando formular reformas, pero al parecer aún queda tiempo para que se cambie esta normativa.
